Las Matildas se quedan con la ilusión de llegar a su primera final mundialista a manos de las actuales campeonas de Europa.
Por: Motoko Blaugrana.
Las Leonas dieron un magistral espectáculo en las semifinales contra Australia, asegurando su paso a la final. A pesar de que las Matildas, las anfitrionas y protagonistas del torneo, lucharon con tenacidad, no pudieron resistir el arrollador desempeño del equipo de Sarina Wiegman, que tiene en mente reinar en el mundo al igual que lo hace en Europa.
Inglaterra confirmó las expectativas que se tenían sobre ellas. El equipo de Wiegman llegó a este torneo como flamante campeón de Europa, tras haber conquistado la Eurocopa del verano pasado en su propio país. La dominante actuación de las inglesas en ese campeonato las puso como serias candidatas para la lucha por el título. Sin embargo, su rendimiento en la Copa del Mundo no alcanzaba aún lo esprado de ellas. Aunque lograron avances, no lograron convencer del todo. A pesar de esto, serán las rivales de España en la esperada final de este domingo.
El enfrentamiento de semifinales contra Australia reflejó de manera perfecta el papel de las británicas en este Mundial. El equipo europeo controló el balón con maestría, construyendo su juego con solidez y estableciendo su autoridad en el campo. El esférico era prácticamente de su propiedad, y las Wallabies no tuvieron forma de arrebatárselo. Los contragolpes eran el recurso favorito de las australianas, y el enfoque de las inglesas en el control del balón les favorecía. Aunque hubo destellos de habilidad, el partido no estuvo lleno de acciones emocionantes. Hubo algunas jugadas que incomodaron a ambas defensas, pero las oportunidades reales de peligro fueron escasas. Ese era el guion previsto, hasta que la genialidad hizo su aparición.
El partido estuvo lleno de auténticos golazos. El primero fue obra de Ella Toone, representando a Inglaterra. En el minuto 36, la jugadora del Manchester United anotó un golazo desde dentro del área, poniendo a las dirigidas por inglesas en ventaja en el marcador. Escapando de las defensas australianas, la delantera conectó un potente disparo con su pierna derecha, llevando el balón al rincón superior derecho de la portería de las Matildas. En el repleto estadio de Sidney, la multitud local quedó en silencio.
Sin embargo, las anfitrionas no estaban dispuestas a ser eliminadas sin ofrecer resistencia. En el segundo tiempo, Sam Kerr, la destacada delantera del Chelsea y un ícono nacional para Australia, dejó su huella. Igualó el marcador con un espectacular gol. Kerr, corriendo hacia el área, tomó la decisión desde la zona del borde del área. Con una combinación de astucia y audacia, la futbolista disparó el balón con potencia ante la atónita mirada de los miles de aficionados que no podían creer lo que estaban viendo. El balón se acercó a la portería como en cámara lenta, superando a Earps y encontrando las redes. Tras un segundo de absoluto silencio, el estadio estalló en júbilo ante la genialidad de su líder.
Con el empate en el marcador, las Leonas enfrentaron momentos de dificultad. Las australianas se lanzaron al ataque, lideradas por Sam Kerr, buscando aprovechar el momento. Sin embargo, su precipitación las convirtió en prisioneras de su propia urgencia. En una jugada de contraataque iniciada por las inglesas, Ellie Carpenter intentó detener a Lauren Hemp luchando codo a codo por el balón. Aunque parecía que la defensa oceánica tenía la ventaja para frustrar la acción de la delantera del Manchester City, fallaron en su intento. Hemp logró arrebatar el balón y lo elevó por encima de Arnold para anotar el segundo gol de Inglaterra, acercándolas a la final.
Australia intentó despertar y buscar una remontada, pero finalmente fue Russo quien sentenció el encuentro, provocando lágrimas entre muchos de los aficionados y jugadoras australianas. Con un tiro controlado y colocado con su pierna derecha, Russo superó a Arnold por última vez, acabando así con la ilusión de las Wallabies.
El próximo domingo, estarán en la gran final, enfrentando nuevamente a España, un rival que ya conocen bien. Las eliminaron en la pasada Eurocopa, un torneo que las vio coronarse en el icónico Wembley. Sin embargo, es importante recordar que la venganza se sirve fría.
La gran final será este domingo, 20 de agosto, en el Accor Stadium de Sídney a las 5:00 am de Colombia, y podrá verse por Caracol y DSports.